Fue un gran acontecimiento para todo el país y, en especial, para la ciudad de Barcelona. La primera parte del verano 2015 se inició algo convulsa ante varios temas, como la necesidad de fichar un portero de garantías tras la grave lesión de Diego Alves en la última jornada de la campaña anterior, y la baja también de André Gomes para la disputa de la fase previa de la Liga de Campeones en agosto.